Weirdbits | Los límites del instrumento musical
Wikipedia define a un instrumento musical de la siguiente manera:
objeto compuesto por la combinación de uno o más sistemas resonantes y los medios para su vibración, construido con el fin de reproducir sonido en uno o más tonos que puedan ser combinados por un intérprete para producir música
Y valdría la pena agregar:
Al final, cualquier cosa que produzca sonido puede servir de instrumento musical, pero la expresión se reserva, generalmente, a aquellos objetos que tienen ese propósito específico.
En fin, tus manos, dos piedras chocando o el agua fluyendo constituyen un medio para crear música; si por música entendemos cualquier ruido que nos parece agradable.
Hace un par de días se publico la grabación de la primera música creada por una computadora, la de Alan Turing para ser exacto; ésta fue restaurada por investigadores de la Universidad de Canterbury en Nueva Zelanda, demostrando que además de ser uno de los padres de la computación era también un pionero musical.
Estamos hablando de un monstruo electromecánico que ocupaba una pared entera, la Mark 1 que en nada se parece a nuestras computadoras personales. Turing sólo uso las “propiedades” musicales de su computadora como alarmas para las tareas que realizaba como “trabajo terminado” o “dígitos que desbordan en la memoria”; el encargado de crear las primeras piezas de música fue un maestro llamado Christopher Strachey, quien también era pianista y después de estudiar el manual de la Mark 1 escrito por Turing, se presentó en su laboratorio con el programa de computadora más largo creado hasta el momento. Tiempo después ese programa interpretaría el himno nacional de Reino Unido, recibiendo por parte de Turing un “Good Show”; lo anterior le valió a Strachey una propuesta laboral.
Ahora los genios des nuestros tiempos, con las facilidades de la computación moderna se pueden dar el lujo de componer piezas para una orquesta de floppy drives, discos duros y los huesos de algunos scanners:
La ciudad como instrumento
En 1922 como parte de los festejos del quinto aniversario de la República Soviética, Arsenij Avraamov compuso una pieza, la “Simfoniya gudkov” (sinfonía de las sirenas), usando sirenas en fábricas y barcos, claxons de carros y autobuses, cañones, campanas, aviones, un regimientos de artillería, una banda de guerra y un coro formado por los espectadores como piezas de su orquesta viviente. La canción fue interpretada en Baku, capital de Azerbaijan.
La sinfonía de las sirenas es quizá uno de los ejemplos más ambiciosos de lo que puede ser un instrumento musical, obligándonos a reconsiderar qué es y lo que no es un medio para crear música.
Los dejamos con la siguiente playlist en la que recopilamos algunos temas que hacen uso de artefactos o elementos cuya principal función no es musical, si conocen alguna otra no duden en mencionarlo en los comentarios para agregarla al playlist.
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