Jarvis Cocker: De Pulp a su primer álbum en solitario “Jarvis”
En 2006, el mundo de la música británica presenció un cambio significativo en la carrera de Jarvis Cocker, el carismático líder de la banda Pulp. Tras un receso indefinido de la banda, Cocker lanzó su primer álbum en solitario titulado “Jarvis“. Este álbum no solo marcó un nuevo capítulo en su carrera sino que también reunió a varios músicos talentosos en un solo proyecto.
El álbum fue producido por Graham Sutton y el propio Jarvis Cocker, y se grabó en varios estudios, incluyendo Yellow Arch en Sheffield y Les Studios de la Seine en París. La diversidad de ubicaciones sugiere un proceso de grabación extenso y meticuloso.
Jarvis Cocker no estuvo solo en esta aventura musical. Contó con la colaboración de músicos como Richard Hawley, Steve Mackey y Ross Orton en la banda principal. Es interesante notar que tanto Mackey como Hawley tienen conexiones previas con Pulp, lo que añade una capa de familiaridad al proyecto. Además, músicos adicionales como Martin Slattery y Antony Genn aportaron su talento en diversas pistas.
La portada del álbum fue diseñada por The Designers Republic en colaboración con Jarvis Cocker, mientras que la fotografía fue obra de Serge Leblon. El diseño visual es un elemento crucial que a menudo establece la primera impresión del álbum, y en este caso, la colaboración entre estos creativos logró capturar la esencia del proyecto.
El álbum recibió críticas generalmente positivas, con una puntuación promedio de 82 en Metacritic basada en 30 reseñas. Canciones como “Don’t Let Him Waste Your Time” y “Running the World” se destacaron particularmente, siendo esta última incluso parte de una campaña para convertirla en el número 1 de Navidad en el Reino Unido en 2019.
Entre las pistas más notables del álbum se encuentran “Don’t Let Him Waste Your Time” y “Running the World“. Ambas han recibido considerable atención y han contribuido al impacto y la longevidad del álbum en la escena musical.
El álbum “Jarvis” sirvió como un exitoso debut en solitario para Jarvis Cocker y se convirtió en una obra que reunió a varios talentos musicales. Con críticas positivas y canciones que han resistido la prueba del tiempo, este álbum es un testimonio del talento y la versatilidad de Jarvis Cocker fuera del contexto de Pulp.