Texto :C. Hadad
Fotos: Anany SC
No quisiera comenzar haciendo referencia al confinamiento que vivimos hace poco pero es inevitable tenerlo presente de una forma u otra. Tal es el caso de los grupos que están volviendo a presentarse después de ese periodo, algunos lo hicieron en el momento en que se levantó la pandemia pero otros como los chicos de Budaya esperaron el momento adecuado para volver a presentar su particular música electrónica en la Ciudad de México después de no hacerlo en dos años, por lo que sería interesante ver el proceso evolutivo que representó este periodo para los oriundos de Guanajuato.
Algo tan representativo como esto tenía que ser de alguna manera especial y para ello eligieron un venue que te hace sentir como en casa desde que te refieres a él: Departamento. Aunque antes donde solían tocar los grupos era en el primer piso que hacía justicia a su nombre tocando casi de manera literal en la sala de un departamento ya que propiamente no había un escenario. Y, aunque fuera un espacio más reducido, te hacía sentir un ambiente hogareño. Ahora el evento se llevó a cabo en la planta baja en donde eres recibido por una luz tenue y al fondo puedes ver una barra de bebidas vistosa, a un lado estaría el escenario que propiamente ya lo era al tener un piso elevado y en las paredes un librero para remontar ese ambiente que se tenían antes arriba pero con la diferencia de agregar un espacio con espejos y un contorno de luces led.
Este sería el espacio donde tocarían los tapatíos de BabasTutsipop, quienes se presentarían por primera vez en la ciudad. Sólo es cuestión de ponernos en el lugar de estos chicos al venir a un lugar con tanta gente, con tanta actividad o simplemente algo diferente a lo que suelen estar acostumbrados. Afortunadamente tuvieron de anfitriones a otro grupo que como ellos llegó de otro lugar pero llevando más tiempo viviendo aquí, algo que se podía ver en las historias de su instagram donde al parecer se estuvieron quedando donde viven los chicos de Budaya. Este nerviosismo fue expresado por Ana Verá (voz y teclado) que poco después de empezar a tocar lo mencionó en un momento, pero después de hacerlo fue como si espantara ese sentimiento para así poderse soltar más y desenvolverse mientras tocaban.
Gracias a esto su música estaba siendo recibida de buena manera por la gente, algo que también era percibido por el grupo que se encontraba cada vez más sonrientes mientras tocaban y presentando de esta manera las canciones que tienen letras de Citlalli Ixchel (teclado y coros) la cual recibió elogios de su trabajo por su vocalista. Demostrando de esta manera su particular propuesta al mezclar en un momento performance al bajarse ellas dos del escenario y con su voz desnuda recitar algunos pensamientos entre la gente para regresar de nuevo al escenario y continuar tocando.
Al finalizar sólo quedaba esperar un poco más por el acto estelar, podías pedir otro trago y sentarte en las bancas que había en el lugar donde de fondo podías ver como si se tratara de una sala al tener libreros y demás remontando un poco la esencia del primer piso. No faltó mucho para que se subiera Budaya al escenario para iniciar directamente con “Empire” llenando de esta manera la atmósfera con un feeling muy particular en el ambiente que era comandado por Mariana “Maya” Piña cantando, mientras que Tulio Almaraz se encargaba de sonorizar ese momento. Siendo de esta manera en que demuestran que quedaron atrás los tiempos en que tocaban tímidamente detrás de sus instrumentos y limitándose a permanecer en ese espacio para ahora apoderarse del escenario y mantener una presencia que fue acompañada, e inclusive, alimentada por la gente que los veían y escuchaban en todo momento dejando contagiar su cuerpo con la música que los impulsaba a moverse.
No sé si esto sea algo particular que se da en este foro, la primera vez que supe de ahí fue por un video de un grupo llamado La Redada, en donde se puede ver a la gente bailando de formas totalmente particulares. Posiblemente sea una coincidencia o es algo que incentiva ese lugar. Y justamente esto fue algo que no dejaría pasar Maya al agradecer a la gente que asitió pero sobre todo por escuchar, palabra exacta que utilizó y que debemos saber que es diferente a oír.
De esta forma fueron presentando sus diversos temas que recorren su trayectoria pero incluyendo los nuevos sonidos que han ido creando como la nueva canción “Tu Color”, que para ser presentada a modo de introducción sería dedicada a las personas que estamos esperando por su regreso haciendo referencia directa a lo que habla este tema.
Pero el momento que se podría decir fue cumbre en la presentación fue cuando decidieron tocar algunas canciones de manera seguida sin pausas, las cuales fueron acompañadas por un colega de ellos tocando el saxofón. No sabría explicarme del todo pero el sonido que tenía su instrumento podía remontar a un sonido de la noche, ese tipo de saxofón con eco que aparece en ese anime llamado Cowboy Bebop, o mejor una referencia más inmediata el de Encías Sangrantes de Los Simpson.
Fue así que para este combo iniciarion con “Pupilas” donde se podía notar de mejor manera los nuevos arreglos que le han hecho a sus canciones, algo que es característico del grupo, en donde unos ofrecen lo suele esperar un sector de la población que busca escuchar las canciones tal cual las estuvieron reproduciendo en su playlist, pero los chicos de Budaya hacen lo contrario cambiando un poco la intención de la canción o agregando otros elementos. De esta manera generaron un abismo de diferencia con las canciones en su lanzamiento original y ahora al agregar un elemento externo como lo es el saxofón que cambió totalmente las reglas.
Posteriormente siguió “Calma” siendo en este punto donde era difícil no mantenerse bailando, se podía sentir en el ambiente, con el calor, con tan sólo voltear a cualquier de tus cuatro puntos cardinales. Algo que de nueva cuenta sería recibido por la cantante que se dejó poseer por esa energía para llegar al final del combo que nos estaban asestando, llegando así a “Qué más da” donde transformaron una canción que en origen tiene un poco de melancolía y que llega a ser una balada para convertirse en algo totalmente diferente, al mezclar estos sentimientos con la energía de ese momento como si se tratara de un renacer, como cuando llegas a ese punto en tu vida en que abrazas esa situación no con dolor sino como una oportunidad para aprender ello y poder continuar a partir de tus errores. “¿Qué más da, si llego tarde? La vida me dio más de lo que pude darle”, bien dicen Maya y Tulio.
Con todo esto y al finalizar, naturalmente la gente no quería quedarse sin más música, y como quien no quiere la cosa los chicos de Budaya decidieron tocar una canción más. Un cover de Moenia que se encuentra presente en algunas de sus presentaciones, complaciendo de esta manera ese deseo de cantar en colectivo en un bar, de está manera conectando con esos tiempos dosmileros que se suelen recordar con nostalgia. Como hemos cambiado desde entonces, ¿recuerdas cómo eras en ese tiempo? Seguramente te avergonzarías de ciertas cosas pero ese fue el camino que te llevó a lo que eres ahora y aunque ese proceso puede llegar a ser solitario aún en momentos en que estás rodeado de personas importantes pero siempre tendrás un soundtrack como el de esta ocasión que te acompañará y te impulsará.