Una película de Minecraft llega a Max este 20 de junio con una historia que mezcla bloques, creatividad, acción, humor y muchas risas. La esperada adaptación live-action del videojuego más popular del planeta finalmente cobra vida de la mano de Warner Bros. Pictures y Legendary Pictures, bajo la dirección del peculiar y carismático Jared Hess, conocido por su estilo único reflejado en películas como Nacho Libre y Napoleon Dynamite.
En esta épica travesía, cuatro personas aparentemente comunes —Jason Momoa como Garrett “El Basurero” Garrison, Sebastian Hansen como Henry, Emma Myers como Natalie y Danielle Brooks como Dawn— son arrastradas al misterioso y fascinante Overworld, un universo hecho completamente de bloques donde las reglas cambian y la imaginación es la herramienta más poderosa. Dentro de este entorno visualmente impactante, los protagonistas deberán adaptarse rápidamente mientras descubren nuevas habilidades y enfrentan amenazas pixeladas como Piglins, zombis y otras criaturas icónicas del videojuego. En su camino encontrarán a Steve, interpretado por el siempre camaleónico Jack Black, un constructor experto que los orienta y acompaña en una aventura que pondrá a prueba tanto su ingenio como su valor.
La película se estrenará exclusivamente en la plataforma Max el próximo 20 de junio, reforzando su propuesta Del Cine a Max, la cual ha redefinido la forma en que el público accede a los grandes estrenos desde casa. Un día después, el 21 de junio, también se podrá ver en la señal lineal de HBO, llevando esta experiencia a una audiencia aún más amplia.
Uno de los mayores logros de Una película de Minecraft es cómo logra capturar la esencia del juego original sin sacrificar la narrativa cinematográfica. El guion, cuidadosamente estructurado, evita caer en fórmulas vacías y, en cambio, ofrece una mezcla vibrante de humor, acción y momentos emotivos. La cinta evoca una buena dosis de nostalgia para quienes crecieron picando piedra virtual, pero también abre la puerta a nuevas generaciones que apenas comienzan a explorar el universo Minecraft.
La producción destaca por su mensaje positivo sobre la colaboración, la empatía y la creatividad como formas de resolver conflictos y construir comunidad. Aunque los protagonistas provienen de mundos y contextos muy distintos, logran trabajar en equipo y descubrir aquello que los hace especiales, aprendiendo a sobrevivir —y prosperar— en un entorno desconocido y cambiante. Con un elenco diverso y de alto calibre, efectos visuales vibrantes y un ritmo bien equilibrado, la cinta se posiciona como uno de los lanzamientos más ambiciosos del año en cuanto a adaptaciones de videojuegos se refiere.
