En un contexto marcado por la hiperconectividad y la exposición constante a estímulos digitales, E-ENFOQUE se presenta como un proyecto que propone detener el ritmo acelerado de consumo de información. Desarrollado por Edgar Mondragón en colaboración con IMGN (proyecto de Erik López), esta iniciativa reúne 12 piezas audiovisuales creadas a lo largo de 2025, pensadas como espacios de pausa y contemplación frente a la saturación que define la vida contemporánea.

El proyecto parte del uso del drone como eje conceptual y formal. En términos musicales, el drone se construye a partir de tonos sostenidos, capas prolongadas y texturas que evolucionan de manera lenta y constante. En E-ENFOQUE, esta aproximación sonora evita estructuras narrativas tradicionales, clímax o resoluciones evidentes. La escucha se desplaza hacia el detalle, la duración y la percepción del tiempo, invitando a una relación distinta con el sonido y con la atención.
A nivel visual, las piezas se articulan mediante imágenes de carácter minimalista y transformaciones graduales que dialogan directamente con el componente sonoro. El resultado es una serie de experiencias donde sonido e imagen funcionan como un solo cuerpo, generando entornos que favorecen la concentración y la observación prolongada. Cada obra puede experimentarse de forma independiente, aunque en conjunto conforman un ciclo que refuerza la idea de permanencia y enfoque sostenido.
E-ENFOQUE también se distingue por su carácter multiplataforma. Las 12 piezas se presentan en formatos que incluyen videos, performances en vivo, un canal de YouTube, un stream perpetuo de ambient/drone con visuales y una instalación inmersiva. Esta diversidad de soportes amplía el alcance del proyecto y permite que la experiencia se adapte a distintos contextos, manteniendo siempre su objetivo central: construir un espacio contemplativo que funcione como contrapunto a la hiperestimulación cotidiana.
Más allá de ofrecer respuestas cerradas, el proyecto plantea una estrategia clara: ralentizar, detenerse y reenfocar la percepción. Desde esta perspectiva, E-ENFOQUE utiliza el drone como una herramienta tanto estética como conceptual para cuestionar nuestra relación con la tecnología, el exceso de datos y el flujo ininterrumpido de información. La propuesta se sitúa así en un punto de encuentro entre la música experimental, el arte audiovisual y la exploración de estados de atención plena.