Nsqk: revolucionando el pop

Nsqk: revolucionando el pop

“Quien no conoce su historia, está condenado a repetirla” es una frase del filósofo José Agustín Nicolás Ruíz, y es probablemente una de mis favoritas.

Es muy fácil perdernos en un bucle infinito de lo mismo, cometer errores idénticos al aplicar las mismas fórmulas. Y sí, también aplica para la música. Es decir, ¿cuántas veces no le hemos reclamado (aunque sea en nuestra mente) a un proyecto, artista, productor o banda por no arriesgarse y, por lo tanto, no evolucionar? En estos días, ya no nos conformamos con que cada entrega suene igual a la anterior. Es muy fácil perderse en una zona en la que, erróneamente, creemos ser expertos.

Hoy, me atrevo a decir, es la mejor época en la historia para la música en español, específicamente para la música mexicana. Digo, no por nada, en un podcast, unos boricuas decían y aseguraban que México se apoderaría de la industria musical. Es real, ya era hora; todos los países hispanohablantes han tenido su turno y, por consecuencia, sus exponentes históricos: desde Bad Bunny (PR), J Balvin (COL), hasta Cerati (ARG), por mencionar algunos.

Este país ha funcionado como una catapulta que desarrolla (o termina de hacerlo) el talento sudamericano y centroamericano, y sirve como una plataforma importantísima para sus carreras. Desde festivales hasta presentaciones en solitario y, obviamente, millones de reproducciones en la plataforma de streaming de tu preferencia. Entonces, ¿en dónde quedaba todo el talento nacional? ¿Por qué los charts eran de los extranjeros? ¿Qué pasaba en el proceso, donde los headliners no presentaban figuras mexicanas? Los proyectos salían y salían, pero nada era tan trascendental. Entonces era hora de que, generacionalmente, se colocaran exponentes y se conectara con las audiencias que hoy consumen más que nadie en el mundo. Cabe mencionar que en el regional y en el reguetón todo está bajo control; si no, ahí están Natanael Cano, El Malilla y Peso Pluma, este último liderando la más reciente edición de Coachella… para nada algo menor. Era definitivo, había que hacer algo por el mercado nacional y los demás géneros.

Rodrigo Torres de la Garza, mejor conocido como Nsqk, ha estado activo en su carrera solitaria desde 2019, y es, cinco años después, que llega con “ATP”, probablemente uno de los mejores álbumes de este 2024. En un viaje introspectivo, donde se fusionan el hip hop, el R&B y un par de ritmos “urbanos”, hace una mezcla única, dándole un nuevo significado y revolucionando el pop. Su narrativa es tan clara, que cada canción funciona con las demás, nada salta ni incomoda, además, sus barras y melodías son perfectas, haciéndonos decir el ya tan cliché “sí soy”, pues las 17 pistas nos envuelven en un viaje melancólico y reflejan todo lo que queremos decir, remontándonos a esos momentos de intimidad e introspección cuando se ha terminado una relación.

Nsqk vía Facebook

A nivel producción, construye escenarios y ambientes sonoros que, en ocasiones, juegan con los espacios y lo minimalista para dar un sentido completamente diferente de canción en canción. gran plus es el entorno de la radio local, donde el locutor es El Mariana, la personalidad más importante del streaming en México. Una fórmula que no escuchaba desde ese ya lejano “Songs for the Dead” de Queens of the Stone Age.

“ATP” coloca a Nsqk como la cara del género a nivel nacional, mutando hasta encontrar el modelo perfecto y, sobre todo, sabiendo que si no quería pasar desapercibido, tendría que conocer todo el contexto de sus predecesores y, de esa forma, no repetir los mismos métodos. Larga vida a este álbum, que refresca por completo lo que ya conocíamos y lo hace una experiencia completamente emocional, colocando a su creador en lo más alto, explorando su evolución y marcando una pauta para el nuevo mercado, conectando con una audiencia joven que, cabe mencionar, encuentra al exponente que tanto había buscado.

Nsqk llega al Pepsi Center este 21 de septiembre, presentando “ATP” en el Alter Ego Tour, consigue entradas en ticketmaster.

alterego