La mezcla entre naturaleza, arte, color, baile, electro, sonidos urbanos y armonía con un toque de Jazz; es lo que caracterizó en esta edición al Carnaval de Bahidorá. La extravaganza y lo estrafalario fueron los hilos conductores de esta fiesta; los alter egos, el folklore de colores, los sabores gourmet y la buena vibra también se hicieron presentes. La celebración comenzó desde el viernes, en donde los presentes bailaron con ritmos latinos a cargo de Jose Marquez, una vez ambientados, los asistentes bailaron bajo los ritmos africanos de Sabine Blaizin y los múltiples remixes de Nickodemus, siguieron los actos de Rich Medina y Kenny Dope para terminar la noche.
Fueron cinco los escenarios en donde se presentaron más de cuarenta artístas, el Sonorama, Bunker, La Estación, El Umbral y El Asoleadero. Varias actividades ayudaron a complementar la atmósfera de creatividad y psicodelia, mediante performances, proyecciones, sesiones de relajación, talleres e instalaciones artísticas.
Los esperados headliners trajeron a varios nuevos asistentes quienes desentonaban a simple vista con la atmósfera del carnaval aunque eso no fue una limitante, poco a poco se fueron acoplando dejándose llevar por los beats de cada escenario. Dentro de los más esperados del día se encontraban, Sidestepper, Ariel Pink, Mount Kimbie, y Kamasi Washington.
Ariel Pink y su lo-fi fue una de las presentaciones que más se esperaban, su sonido melancólico lleno de psicodelia fue un viaje hacia la nostalgia y el misticismo. A pesar de ser un personaje introvertido Ariel Pink logró conectar con quienes se encontraban presentes en el escenario Sonorama utilizado el lenguaje universal, la música. Esta presentación fue la última de su gira con la alineación actual por lo que fue una ocasión especial.
Desde 2015 Kamasi Washington ha estado en la mira de varios medios, su disco The Epic le dio un nuevo respiro al jazz. Este género que pareciera estar en el olvido, empieza a tener nuevos exponentes y seguidores, todo gracias músicos como Kamasi y su banda The Next Step. En esta ocasión se presentó con su nuevo disco Harmony of Difference.
Dentro de su repertorio de una hora nos pudo dar una muestra de su virtuosismo, interpretando canciones como: Re Run, Truth y The Rythm Changes. La cereza del pastel fue tener la presencia de Rickey Washington, su padre, quien tocó la flauta transversal durante la presentación.